Una herida del pasado había hecho que Alícia, una ejecutiva catalana de treinta años, jurase que nunca pisaría China. Pero una magnífica oferta laboral la conduce hasta Pequín, donde cuatro años después lleva una vida aún muy alejada del mundo chino.
Hasta que unas fotos antiguas la dan pistas sobre su padre desaparecido y es así como Alícia iniciará una búsqueda que la conducirá hasta verdades inesperadas y a reconciliarse con ella misma, con su pasado y con un país tan perturbador como fascinante.