Hola. Me llamo Duna y este es mi diario de verano. Estoy con mis dos hermanas en casa del abuelo, un gruñón. Mamá nos ha dejado tiradas en este pueblo blanco y azul frente al mar y el maestro del colegio me ha puesto como deberes escribir todo lo que me pase antes de entrar en el instituto. No lo negaré: parecía que iba a ser el verano más aburrido de mi vida. Pero ahora, entre la pandilla tarambana, los secretos del abuelo, y un chico super interesante que he conocido en el bosque, parece que la cosa se va animando. Todo apunta a que este será un verano especial, de descubrimientos, de los que te hacen crecer.
«Bajo la aparente sencillez del diario de vacaciones de Duna, esta pequeña maravilla nos habla del cóctel de emociones y sensaciones que nos abruma cuando dejamos atrás la infancia.
El ocio compartido con las hermanas en un pueblo de la costa, bajo la mirada del abuelo borde y con la ausencia, buscada, de la madre, se vuelve especial cuando conoce a un niño callado, Max.
Con una prosa bellísima, Duna nos explica de forma natural, creible y fluida, el primer amor, la primera regla, el primer enfrentamiento con su madre y el descubrimiento de la fragilidad de los adultos. Todo condimentado con misterios hábilmente dosificados, igual no tan transcendentes como los relacionados con la pregunta del millón: ¿quién soy?» – Joan Bustos, Faristol