Las relaciones humanas, auténticas, sinceras y empáticas son las que reivindican los protagonistas de estos cuentos.
Hombres y mujeres normales como Anne o Pol que buscan el amor y no lo encuentran; parejas que se quieren; parejas que conviven sin quererse y que malviven con los sentimientos cerrados a cal y canto.
Emma, una viuda que cada noche se reencuentra con su marido fantasma; un hombre con corazón de corcho coleccionista de mujeres bonsais, con el alma enferma… Toda una serie de personajes temporalmente perdidos o defintiviamente rotos que cargan bajo el brazo las pesadas cajas llenas de los recuerdos que conforman toda una vida y que de vez en cuando hace falta vaciar para poder tirar adelante.